Mexicanos celebran los Oscar de Guillermo del Toro
CIUDAD DE MÉXICO, 5 MAR – Los cuatro premios Oscar obtenidos por la película “La Forma del Agua” de Guillermo del Toro desataron el júbilo en todo México, donde se festejó como a un héroe al notable realizador mexicano.
Los reconocimientos a lo mejor del cine estadounidense fueron interpretados como una especie de “justicia poética” contra el presidente Donald Trump.
“Fiesta Nacional”, reportó en una alarma noticiosa enviada a los teléfonos móviles el domingo a la noche (hora local mexicana) por el sitio on line del diario Milenio apenas se conoció el veredicto del jurado sobre el Oscar al mejor director, después de que le habían otorgado por Mejor Película, Mejor Banda Sonora y Diseño de Producción.
“Guillermo del Toro llena de gloria a México en los Oscar”, tituló el diario Excélsior en su sitio digital, mientras que diversas figuras políticas, entre ellos varios candidatos presidenciales felicitaron en cascada al realizador.
La ministra de Cultura, María Cristina García, en un mensaje por Twitter, calificó como “un orgullo para México” el reconocimiento.
El presidente Enrique Peña se abstuvo de enviarle un mensaje, después de que el año pasado Del Toro declaró que no le gusta que lo felicite el mandatario.
Millones de mexicanos se desvelaron para no perderse ni un solo detalle de la transmisión de la ceremonia y esperaron al final para constatar que la “cereza de la torta”, el premio al Mejor Director, se le otorgara a su compatriota.
Algunos grupos de personas se reunieron a altas horas de la noche en el Angel de la Independencia de la Ciudad de México y la estatua de La Minerva de Guadalajara, la ciudad occidental donde nació Del Toro, dos de los lugares emblemáticos del país.
Los seguidores de Del Toro festejaron esta victoria como cuando ocurren las grandes hazañas deportivas del país, ondeando banderas del país y gritando “Toro, Toro” y “Sí se pudo, sí se pudo”.
Los galardones fueron interpretados como una “dulce venganza” contra el presidente Donald Trump, que ha arremetido contra a México de manera incesante desde que asumió su cargo el 20 de enero del 2017, proponiendo entre otras cosas construir un muro en la frontera entre ambos países.
“La 90 entrega de los Oscar fue una celebración de todo lo que Trump considera incorrecto”, afirmó el analista Sergio Sarmiento, quien dijo que “los mexicanos han hecho las noches de Oscar muy difíciles para Trump.
Sarmiento recordó el caso de los otros dos grandes cineastas mexicanos que han despuntado en Hollywood, Alfonso Cuarón y Alejandro González Iñárritu, con los cuales formó una triada poderosa, que se refuerza con el también premiado fotógrafo Emmanuel Lubezki.
Para el analista, este año “La Forma del Agua” recibió 13 nominaciones, “suficientes para mandar a dormir al presidente sin lanzar ningún tweet”.
En sus primeras palabras, en el escenario, empuñando en una de sus manos la estatuilla de mejor director, Del Toro se proclamó como “inmigrante” como antes lo hicieron Cuarón e Iñárritu. “Soy un inmigrante como Alfonso y Alejandro, mis compadres, como Gael (García), como Salma (Hayek) y como muchos de ustedes.
Y en los últimos 25 años he vivido en un país sólo”, afirmó.
El realizador, productor y guionista, exponente del cine fantástico -nominado al codiciado premio en 2007 por “El Laberinto del Fauno”- se convirtió en el tercer director de su país en ganar un Oscar en los últimos cinco años -Cuarón en 2013 e Iñárritu en 2014 y 2015), con los cuales mantiene una estrecha amistad.
La presencia mexicana se reforzó además en la noche de los Oscares con la cantante Natalia Lafourcade y Gael García, que cantaron en inglés el tema de “Coco”, la cinta de Walt Disney que se llevó el Oscar a la Mejor Película Animada, y que alude en la tradicional fiesta de “Noche de Muertos” que cada año se celebra en México.
Como presentadores también participaron otros dos mexicanos que se abren paso en Hollywood, Eiza González, protagonista del largometraje “Baby Driver”, y el comediante Eugenio Derbez, que presentó a Lafourcade y a Gael García, e hizo una broma sobre el muro de Trump.
América Latina estuvo también presente en la fiesta con Chile, que ganó por primera vez el Oscar de Película Extranjera, con “Una Mujer Fantástica”, de Sebastián Lelio.